Control de calidad en los envases de plástico
¿Qué objeto de plástico fue el último que tuviste en las manos? ¿Sabes todas las pruebas y normas de seguridad y fabricación que tuvo que pasar?
Cada resina plástica tiene sus particularidades físico químicas que exigen ciertos controles de calidad. No será lo mismo los controles de calidad para el plástico de un tupper, que para una plástico utilizado en el calzado, por ejemplo.
Cualquier plástico debe asegurar los controles de calidad estandarizados según sus resinas plásticas o componentes, y según el uso del producto de plástico procesado.
Es decir, también debemos tener en cuenta como el uso particular de cada resina plástica tiene controles de calidad específicos, aunque la mayoría de ellos regulados por distintas asociaciones nacionales e internacionales.
El día de hoy hablaremos de los procedimientos o pruebas de control de calidad más usuales en los plásticos, sobre todo en los envases más importantes.
Sea cual sea el producto o la resina plástica que necesites, debes contar siempre con la experiencia y respaldo de un fabricante y comercializador de resinas plásticas que garantice desde un inicio la calidad de los procesos de todos tus plásticos procesados.
En Grupo Quimisor, empresa 100% mexicana, tenemos más de 30 años comercializando resinas plásticas de la más alta calidad de los fabricantes más reconocidos en el mercado.
¿Qué procesos de control de calidad del plástico son los más frecuentes?
Hemos hablado anteriormente como los procesos de transformación de las resinas plásticas son variados según el objetivo que se busca con el producto terminado.
En ese sentido, uno de los factores decisivos para el diseño y fabricación de un envase de plástico, es el saber qué contendrán en su interior.
Hoy hablaremos de las pruebas más frecuentes a los envases de plástico, que podemos dividir en la siguiente clasificación, según su uso:
- Alimenticios
- De limpieza
- De cuidado personal
- Automotriz
- Industrial
- Farmacéuticos
Cada uno de ellos está diseñado con una funcionalidad que tiene el objetivo primordial de proteger el contenido, sin alteración alguna.
Es en el sentido precisamente de comprobar y perfeccionar su función, que las pruebas de control de calidad tienen estipulados sus procesos.
De esta manera se cumplen 3 características básicas de los envases: protección, funcionalidad y motivación.
La protección que brindan los envases de plástico es clave para mantener inalterable al producto, así como ayudar a que las condiciones de su traslado y almacenamiento sean en todo momento óptimas.
Esa protección tiene una doble importancia en los envases farmacéuticos y alimenticios, cobrando esto también aún más relevancia en tiempos de COVID-19.
Por su lado, la funcionalidad del envase es clave para que su desempeño pueda ser el deseado, y que pueda ayudar a aspectos de experiencia de usuario, o de identificación del producto, dándole una dimensión más profunda y explotable al envase.
Y al referirnos a la motivación de un envase, el término tiene que ver con todos aquellos procesos de cómo se vende y/o ofrece el envase al consumidor o al mercado, teniendo que ver con áreas de promoción o ventas, directamente.
¿Qué pruebas podemos hacer para un control de calidad de los plásticos?
Con el fin de evaluar la calidad tanto de los materiales de plástico, así como de los envases, cada país cuenta con un marco de acción, dictado por ensayos que están reportados en una amplia diversidad de normas oficiales según el territorio o país, así como publicaciones oficiales internacionales.
La gran relevancia de estas normas radica en unificar los criterios para un control de calidad que garantice totalmente la vida, protección y funcionalidad del envase o del plástico.
Esto es aún más importante ya que estas pruebas o ensayos no están incluidos todos en una sola norma, debido a la gran producción de envases, materiales y resinas plásticas, aunado esto a que es prácticamente imposible aplicar todas las pruebas o ensayos en su totalidad a un solo producto.
En México tenemos las pruebas técnicas reguladas por las Normas Mexicanas (NMX) y las normas ISO, siendo estas 2 de mayor predominancia en el territorio nacional, pero teniendo presencia y autoridad las pruebas de algunas farmacopeas como la estadounidense y británica.
Por ejemplo, la norma NMX-E-002-SCFI-2003 muestra las referencias para determinar el ancho de película de Polietileno.
Por otro lado, la norma NMX-E-139-1986 suele ser utilizada para hacer pruebas de inspección para detectar defectos de partículas extrañas, poros y rayaduras.
Como podemos observar, esta gran multiplicidad de factores a cuidar según el tipo de envase de plástico a producir, determina las pruebas a o normas a las que se somete, por lo que si estás buscando lograr el envase de plástico perfecto, debes siempre analizar y diseñar cada rincón y momento de tu envase.
De esta manera, podemos separar las pruebas de calidad en los envases plásticos en 3 grandes grupos: pruebas de identificación del material, pruebas de caracterización, desempeño y resistencia, así como pruebas fisicoquímicas y químicas.
Pruebas de identificación de material
Estas pruebas suelen ser a través de contacto con solventes, o bien con pruebas físicas.
A su vez, existen también pruebas de identificación de resinas plásticas a través de métodos como la espectroscopía infrarroja, donde el espectro que se dibuja al analizar la muestra hace match con un espectro que debe corresponder con el material buscado.
Algunas de las pruebas de identificación de materiales son las siguientes.
Prueba de flotación: las resinas plásticas son puestas en contacto con líquido, dando como resultado que el Poliestireno (PS) no flota, quedando suspendido y sin hundirse en el líquido; mientras que PVC y PET se hunden y no flotan.
Prueba con solventes tetracloruro de carbono y acetato de etilo: el PVC se aglutina al entrar en contacto con el tetracloruro de carbono, no siendo así con el acetato de etilo.
Por su lado, el PS sí se aglutina con ambos disolventes, dando como resultado una especie de masa grumosa.
Finalmente, ni el Poliestireno, ni el Polipropileno, ni el PET ni el PEAD o Polietileno de Alta Densidad se aglutinan en ninguno de estos dos solventes.
Pruebas de caracterización, desempeño y resistencia
Estas pruebas buscan garantizar la funcionalidad del envase al simular el contexto, momento o procesos tanto de manufactura, así como de transporte, almacenamiento o cualquier tipo de manipulación.
Entre las más frecuentes de este tipo de pruebas podemos mencionar las de rayado de material, por ejemplo.
Las pruebas de rayado de material se efectúan por lo general haciéndose con una punta de metal con un peso o carga específica, dando como resultado que el PP, PET y PVC no quedan con marca, mientras que el PEAD se raya con facilidad.
Estas pruebas también incluyen pruebas de transmisión de luz para envases sellados y envases con tapa, entre muchas otras más como las de determinación del peso.
Pruebas fisicoquímicas y químicas
Estas pruebas nos ayudan para predecir lo más posible el comportamiento del plástico del envase sobre el material envasado
Las pruebas de resistencia química son vitales para tener la seguridad que la resina o resinas plásticas de las que está hecho el envase no produzcan reacción alguna que ponga en peligro el contenido del envase ni la salud o seguridad del usuario.
Los objetivos de estos 3 tipos de pruebas de control de calidad de resinas plásticas y productos terminados de plásticos son complementarios y deberás contar con el cumplimiento de estas normas para un correcto funcionamiento de tu producto o plástico.
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